Capaz de autoabastecer todas las necesidades energéticas de la granja sin recurrir a gasoil ni tendido eléctrico.
Producción de energía renovable e introducción de la economía circular en la industria alimentaria.
Para conseguir que esta tipología de planta de biogás sea rentable, es muy importante que esté dimensionada a las necesidades y capacidad de cada explotación, de este modo conseguimos reducir los costes y amortizar la inversión en un plazo menor.
Con una producción aproximada de 19.000T de purín se obtendrán cada año unos 390.000m3 de biogás.
Después de un proceso de limpieza donde se elimina la humedad y el ácido sulfídrico que pudiera contener, el gas se puede almacenar de forma segura y puede ser utilizado en un motor de cogeneración para producir calor y electricidad con bajas emisiones y a partir de una fuente renovable.
Este tipo de plantas tienen la capacidad de gestionar diversos tipos de subproductos, como polvo de tabaco, rabiohoja de remolacha procedentes de la propia granja o de empresas agrícolas de la comarca.
Biogás producido: 415.000m3 Nm3/año
Materia prima: Residuos comerciales, orgánicos industriales, vegetales y fangos.
Energía térmica producida: 950MWh /año
Energía eléctrica producida 76 MWh
Capacidad de gestionar biorresiduos más complejos, cómo la paja del arroz o la remolacha.
En funcionamiento
Esta tipología de planta de biogás cierra un modelo circular a través del cual los purines y lodos procedentes de sus explotaciones ganaderas, matadero y fábrica, a los que se suman residuos vegetales, son transformados en energía, favoreciendo mediante el desarrollo de la economía sostenible y comprometida, el mantenimiento de la dehesa.